La vuelta al cole y el frío, han llegado al mismo tiempo, también al mercado de capitales.
La primera semana de septiembre parece un “dejá vu” con lo sucedido en los primeros días de agosto, pero con menor intensidad y más cordura. Los recortes que se han producido, tras los máximos alcanzados en agosto, han tenido como excusa el mal dato de actividad manufacturera en EEUU y las declaraciones del presidente del Banco Central de Japón, hablando de una posible nueva subida de tipos.
Las dudas sobre la evolución de la economía americana, han trasladado el debate a en cuanto van a bajar los tipos de interés en EEUU, si un 0,25% ó un 0,50%. Para los analistas, el recorte del 0,50% podría ser interpretado como una preocupación de Powell con la desaceleración de la economía, porque normalmente, las bajadas son de un 0,25%. Esta incógnita se despejará el día 18 de septiembre y mientras tanto, seguirá la especulación.
El dato de empleo conocido esta semana, ha reflejado que el desempleo ha mejorado una décima hasta el 4,2%, respecto al mes pasado, pero no se cumplió el objetivo de puestos de trabajo creados. Por tanto no hay alarma sobre el mercado laboral, pero es un hecho que se está deteriorando.
La semana próxima se conocerá el dato del IPC americano, que también es relevante. Un dato peor de lo que espera el mercado, sería un jarro de agua fría para la Reserva Federal, que ya se ve forzada a bajar tipos, pero que al mismo tiempo debe controlar la subida de precios, para garantizar que se encamina al objetivo del 2%, pero sin que la economía americana entre en recesión.
En la Zona Euro, los datos macroeconómicos del comienzo de mes, siguen reflejando que la actividad manufacturera continúa con problemas, mientras aguanta el sector servicios, como ha sucedido en meses anteriores, lo que ha hecho que el PIB del segundo trimestre aumente un +0,2%, aunque con una décima menor al primer trimestre del año.
La semana próxima se reúne el Banco Central Europeo, por lo que veremos si Lagarde vuelve a bajar tipos, como lo hizo en junio, ahora que tiene la confirmación de que EEUU va a empezar y que además la economía de la Zona Euro lo necesita.
En cuanto a sectores, destacar que el “frio” ha llegado al sector tecnológico, sobre todo a las empresas relacionadas con la inteligencia artificial, que tras la euforia de los últimos meses, ha pasado a una etapa de ver y esperar, con recorte en sus valoraciones, tras los máximos alcanzados.
En este entorno, los grandes ganadores siguen siendo los activos de renta fija en general, que se ven beneficiados de las bajadas, si tienen duración superior a un año, porque todos los activos a corto plazo, como letras o pagarés, serán los primeros en sufrir los recortes de tipos, aportando menor rentabilidad a los inversores.
Por ello ahora más que nunca, hay que tener sólo activos a corto plazo si es para un dinero que se necesita en menos de un año, pero en caso contrario ,hay que construir otro tipo de carteras, para aprovechar todas las oportunidades que hay en el mercado.