El tsunami electoral vivido el 28M nos ha metido de lleno en unas elecciones generales, al tiempo que han adelantado cambios que no esperaban hasta el año próximo.
El adelanto electoral abre la puerta a la esperanza para todos aquellos que pensaban que el gobierno actual se iba a perpetuar en su sillón, tal y como ellos deseaban y para lo que han trabajado, pasando todas las líneas rojas posibles.
Los ciudadanos españoles, una vez más, están a la altura de las circunstancias, actuando de forma responsable ante la grave situación que vive nuestros país, con un deterioro social e institucional, como no lo habíamos visto en época de democracia.
La primera consecuencia de este adelanto electoral, es dejar prácticamente muerte la ley de vivienda, así como otras muchas que se estaban preparando en el sector energético, en materias de pensiones etc.
Desde el Partido Popular, Feijoo ya ha anunciado que su intención es bajar impuestos, al tiempo que eliminará el que se está aplicando a las empresas energéticas y al sector bancario. Aunque la música suena muy bien, lo cierto es que desde el poder comprobará que la letra no es tan fácil de aplicar, por el enorme grado de endeudamiento de nuestro país, así como el enorme compromiso de gastos recurrentes. No obstante desde algunas las Comunidades Autónomas ya se está haciendo y esa senda seguirán, en materia de sucesiones, donaciones, e incluso en el impuesto del patrimonio. El margen de bajada no es tan amplio como nos gustaría, pero cualquier alivio será bien recibido.
Desde JP Morgan consideran que un gobierno del Partido Popular mejorará la situación económica de España, algo que por experiencia sabemos, porque ya ha ocurrido lo mismo en los últimos 30 años. Lo que ahora deberá añadir este nuevo Gobierno, de concretarse el 23 de julio, es fortalecer de nuevos las instituciones, modificar la ley electoral, para que no volvamos a vivir una situación de chantaje de las minorías, que impongan sus ocurrencias y deriva, a las mayorías, así como la vuelta a una normalización de la sociedad y la relación entre las personas, que ha puesto patas arriba muchas de las leyes aprobadas por el actual gobierno, generando tensiones y enfrentamientos, entre buena parte de la población.
Como todos sabemos y podemos imaginar, la tarea que van a tener por delante es titánica y sólo a prueba de personas muy comprometidas y valientes, que piensen más en trabajar mucho y bien, por el conjunto de los españoles, que sólo por mantener sus puestos de trabajo, que es lo que estaba haciendo el gobierno hasta el momento.
La crisis bancaria vivida en marzo en EEUU ya había adelantado el tope de la subida de tipos, y todo apunta que en junio podemos asistir a las últimas subida, con los tipos en la Zona Euro en el 4% y en EEUU en el 5,25% actual, o en el 5,5%, en el supuesto caso de que subiesen otro 0,25% a mediados de mes.
Ante esta situación de tipos en máximos, se adelanta el incorporar renta fija a las carteras, duraciones algo más largas, para atrapar la rentabilidad atractiva de los cupones y posteriormente la que la puede añadirse por precios, cuando el mercado empiece a descontar bajadas de tipos.